Análisis de la situación actual del negocio, así como de su relación con el mercado, sirviendo ambos factores como un punto de partida que permitirán establecer las acciones con las que alcanzar los objetivos esperados.

Algunos de los aspectos claves en el desarrollo de la consultoría estratégica están relacionados con la cuestión de gestión de personal, financiero, tecnología, operaciones o comunicación, aunque realmente podría vincularse a cualquier área de negocio.

Uno de los objetivos de la consultora será plantear la metodología para desarrollar la futura estrategia a seguir por la compañía, previamente deberemos haber realizado un briefing o mapa de instrucciones que defina, grosso modo, la situación sobre la que queremos intervenir y cuáles son los objetivos y resultados deseados.

El valor de nuestra consultora es, precisamente, su capacidad de análisis y percepción de la situación, contextualizando el aspecto de mejora frente al histórico de la vida de la empresa y el departamento, así como su relación con el entorno.